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Tras un segundo trimestre muy intenso, el departamento de instrucción dedica el verano a anticipar y coordinar el último periodo del año

El segundo trimestre (abril-junio) de 2022 impartimos el programa formativo más intenso en la historia de Iberia Express. Y es que, en tan solo tres meses, formamos a unos 200 nuevos tripulantes de cabina, 35 nuevos sobrecargos y 38 copilotos. Después de esta dinámica, en verano tratamos de realizar los cursos mínimos necesarios de tal manera que los tripulantes puedan tener máxima disponibilidad para volar y a la vez puedan disfrutar de unas merecidas vacaciones.

Aún y todo, en el departamento de instrucción, aunque parezca lo contrario, la temporada de verano es clave, porque en esta época del año es cuando se empiezan a coordinar todos los entrenamientos con antelación y se reservan los recursos necesarios para el mes de septiembre que, como es habitual, es un mes en el que tenemos bastante instrucción.

A septiembre se atrasan aquellos entrenamientos que podrían darse en verano, pero su fecha de caducidad es en septiembre, y también se adelantan a tripulantes cuya fecha de caducidad es en octubre o noviembre, respetando los tres meses de colchón para realizar el entrenamiento sobre la fecha de caducidad, que nos proporciona la normativa.

Así pues, en verano tuvimos un entrenamiento periódico en julio que no se podía demorar, y un curso inicial de TCPs en agosto, por necesidades operativas. Y ya en septiembre retomamos una actividad más normal con 4 cursos periódicos (40 crews), dos cursos iniciales de TCPs (40 TCPs), 1 curso inicial de pilotos (8), y el OCC del curso inicial que se inició en agosto (40 TCPs). A todo esto, hay que sumar las 40 sesiones de simulador de vuelo en septiembre, frente a las 10 de julio o agosto.

Cuando Canarias sufrió la tormenta Hermine, fuimos ejemplo de profesionalidad y orientación al cliente

En septiembre llegó a Canarias la tormenta Hermine, que trajo fuertes lluvias, viento, tormentas e inundaciones. Centenares de vuelos fueron cancelados en el archipiélago y en Iberia Express tuvimos que desviar más de 12 vuelos y cancelar un total de 26, esto supuso que, tras el fin de semana, cerca de 7.200 pasajeros se vieran afectados directamente por las incidencias.

En línea con nuestra orientación al cliente, se coordinó un plan de acción para llevar a todos los pasajeros a su destino antes de 24 horas, siendo un claro ejemplo de trabajo en equipo y de flexibilidad de todos los equipos, que permitió resolver la situación de forma excelente.

Para ello, fue clave la monitorización constante de la meteorología que comparte cada aeropuerto, tanto la MET (meteo actual) como la TAF (predicción), para poder tomar decisiones sobre la operación de los vuelos y, en caso necesario, para reprogramar el vuelo hasta que ésta mejore o bien cancelarlo. Claro que, uno de los condicionantes que empeoró la situación fue la falta del sistema de radio ayuda para aproximación y aterrizaje, ILS, en el aeropuerto de Gran Canaria, que, de haber contado con ello, se podría haber evitado alguna cancelación o desvío de ese destino.

Por otro lado, las medidas de contingencia, como el refuerzo de las tripulaciones y la comunicación permanente con las escalas, también fueron esenciales. Además, como parte del plan de acción, tan pronto como remitieron ligeramente las tormentas y las circunstancias lo permitieron, programamos seis vuelos adicionales entre Madrid y Canarias (TFS y LPA) para poder reubicar a todos nuestros pasajeros afectados por las cancelaciones, dos de esos vuelos en un Wide Body A330 de Wamos para incrementar aún más nuestra capacidad. Esto supuso más de 1.300 plazas adicionales en total con lo que, en menos de 24 horas, todos los clientes afectados pudieron llegar a su destino. Algo que marca la diferencia frente a cualquier otro competidor y que muestra la clase de servicio que ofrecemos a nuestros clientes ante las adversidades.

En paralelo, se puso en marcha un plan de flexibilización para todos los clientes, con el fin de que el impacto fuera el menor posible, de modo que los pasajeros hacia o desde Canarias durante los días de las tormentas pudieran cambiar la fecha de su vuelo o solicitar un bono con antelación a la salida del vuelo si lo deseaban.

Plan de contingencia ante la huelga general de control aéreo francés

En septiembre tuvo lugar una huelga general en el control aéreo francés (ATC) que afectó durante unos cuatro días a todo el transporte aéreo en Europa, y es que, el espacio aéreo francés ocupa 14 millones de kilómetros cuadrados a través de Francia continental, el Mediterráneo, el Atlántico y los territorios franceses de ultramar. Ante este evento, la autoridad francesa de Aviación Civil demandó a las aerolíneas con operación en Francia que redujeran a la mitad sus programaciones en aeropuertos galos.

Desde Iberia Express, se implicó a todos los departamentos afectados, tomando acciones tales como aumentar tripulaciones de imaginaria para cubrir vuelos, aumentar comidas para tripulaciones, reforzar puestos en la totalidad de OCC, etc. En este sentido, de manera preventiva, se tomaron acciones para minimizar los retrasos, haciendo nuevos planes de vuelo, cambiando rutas para evitar las que en cada momento estén causando más demora. Gracias a estas medidas proactivas, pudimos asumir retrasos sin necesidad de cancelar nada, y con las imaginarias programadas, se pudieron operar los vuelos programados en el día sin problemas de actividad, algo difícil de gestionar en días con operativa tan complicada. Con todo ello, se sorteó la huelga de ATC de Francia con una afección reducida en nuestros clientes.